Pese a ser estremecido, Lubin venció claramente eliminatoria del peso superwélter contra Gausha
Daniel Pi
@BastionBoxeo
Mohegan Sun Casino, Uncasville, Estados Unidos. Eliminatoria final WBC del peso superwélter.
Por si hubiesen dudas de que Erickson Lubin 23(16KO)-1(1) está listo para disputar un nuevo mundial en el que intentar redimirse del batacazo que padeció en la primera ocasión, el hábil boxeador estadounidense logró la pasada madrugada una amplísima victoria en eliminatoria WBC sobre su compatriota Terrell Gausha 21(10KO)-2-1, exretador mundial y olímpico como amateur que (pese a su buena actuación ante Austin Trout en su último combate) sólo tuvo un puntual momento de éxito en una pelea en la que fue superado en casi todos los asaltos. De todos modos, aunque una cartulina fue acertada, dando 118-110, las otras estuvieron demasiado ajustadas al otorgar un 116-112 y un 115-113 que no se corresponde ni por asomo con lo sucedido.
Durante más de la mitad del combate la pelea no tuvo historia y fue controlada sin problemas por Lubin, ya que siendo el encuentro, como se preveía, de limitado ritmo pudo hacer valer su ventaja en velocidad, reflejos, alcance y precisión para anotar manos escasas pero claras ante un Gausha que a penas tiraba puños y que los que lanzaba eran errados en su mayoría. Fuese por el hecho de que su adversario tuviese una mejor gestión de los tiempos de ataque o por la incomodidad que le supusiese su guardia zurda, Gausha no encontraba la manera de lidiar con su oponente, un Lubin que además usaba bien los desvíos y los bloqueos y que encontraba las brechas para su directo de izquierda, su jab y algunos crochés.
Alcanzado el octavo round, Lubin se decidió a poner algo de intensidad a su actuación y atacó un poco más enlazando su recto de izquierda y sus curvos de mano adelantada, provocando que el tibio Gausha se despertase y en el noveno episodio lanzase más manos también con directos y hooks. De todos modos, el mejor momento de la pugna para Gausha llegó un round más tarde, cuando en el décimo asalto aprovechó un descuido de Lubin (que se separaba de él) y conectó un croché diestro que dejó tocado a su rival, al que hostigó posteriormente con rectos y ganchos. Durante algunos instantes Lubin tuvo que lidiar con el temporal, pero para el undécimo round ya se había recuperado y todavía pudo cerrar el combate en el duodécimo episodio lanzando una ofensiva en la que encerró a Gausha y le alcanzó con un duro croché diestro.
Muchos se están centrando en el momento de apuro del décimo asalto para señalar que Lubin tiene problemas de encaje y que en el futuro le va a suceder igual que le pasó en su mundial ante Charlo. No obstante, una mano de poder puede dañar a cualquier boxeador y, aunque Lubin no debió descuidarse, por lo demás neutralizó de forma evidente a un buen púgil como Gausha, mostrando además sus numerosas cualidades. Lógicamente, existe la amenaza de un knockout en un futuro combate contra la élite, duelo que tiene asegurado al convertirse en aspirante obligatorio del ganador de la unificación entre dos buenos pegadores como Charlo y Rosario. Sin embargo, su rapidez y habilidad y su capacidad para contener los sistemas tácticos de sus adversarios le hacen un rival complejo y difícil de superar a los puntos para la gran mayoría de miembros de la cumbre.