El insigne aspirante wélter Jaron Ennis afianzó su amenaza en la división destruyendo al duro Sergey Lipinets
Daniel Pi
@BastionBoxeo
Mohegan Sun Casino, Uncasville, Estados Unidos. Peso wélter.
Tras el varapalo de su decepción ante Chris Van Heerden y tras superar los problemas con su mánager, el muy prometedor peso wélter estadounidense Jaron “Boots” Ennis 27(25KO)-0 afrontaba una prueba de fuego que iba a decidir si entraba en la lucha directa por acceder al mundial. Con todo, aunque se medía a un durísimo rival como el excampeón ruso-kazajo Sergey “Samurai” Lipinets 16(12KO)-2(1)-1, Ennis dominó las acciones y mermó a su oponente hasta acabar con él en el sexto round.
Aprendiendo la lección de lo que un excesivo empuje puede provocar con el cabezazo ante Van Heerden, Ennis boxeó con calma, anotando afilados jabs ante un Lipinets que erró al permanecer demasiados minutos en el centro del ring sin acelerar sus pasos. No obstante, es justo señalar que en sus puntuales intentos de avance Lipinets recibió claros rectos y explosivas combinaciones de curvos ante un Ennis que además ofrecía plásticas esquivas.
Yendo a más en la pugna, en el tercer round Ennis sacudió con un uppercut a su oponente, lo condujo al ensogado y le alcanzó con fuertes hooks, dejando algo ralentizado al exmonarca, que en el cuarto round hizo un amago de intensificación en su presión antes de renunciar rápidamente a ello y volver a su estatismo. En los breves momentos en corta “Samurai” mostró que podía llegar con sus manos pero, renunciando a atacar con más tesón, se siguió exponiendo a las manos de su rival, que sumó un knockdown a su favor por una errada decisión arbitral al caer Lipinets tras chocar los pies de ambos contendientes casi a la vez que le rozaba un uppercut.
En cualquier caso, esto no tuvo incidencia en el veredicto, ya que Ennis siguió trabajando con calma jabeando, ofreciendo rápidas combinaciones y esquivando hasta que en el sexto round hostigó a Lipinets con curvos y conectó un croché de derecha y un curvo de izquierda que tiraron al tapiz al visitante, deteniendo el tercer hombre el combate.
Al margen de las cuestionables decisiones tácticas de Lipinets, Ennis tuvo una actuación excelente en la que, ante un púgil que siempre se muestra exigente y muy correoso, a penas recibió golpes de relevancia, controló los tiempos y castigó hasta lograr asestarle a su resistente adversario su primera derrota antes del límite. Así, si ya se alababa mucho a Ennis antes de esta victoria, ahora directamente ha dado el golpe en la mesa definitivo para mostrar que tiene el potencial para convertirse en campeón mundial en la dificilísima división.
Es cierto que Lipinets no es considerado un miembro de la élite del peso wélter y que el estadounidense deberá disputar a continuación una pugna a modo de eliminatoria ante un rival de la cumbre de los aspirantes para certificar su posición, pero Ennis no está mostrando a penas brechas y está evidenciando excelentes habilidades que serían una dificultad para cualquiera en la categoría, debiéndose subrayar además que a sus 23 años todavía tiene mucho tiempo para mejorar.