El peso superpluma Michael Magnesi venció en el primer asalto al invicto campeón de Sudáfrica Khanyile Bulana

Daniel Pi
@BastionBoxeo

Palazzetto Valle Martella, Zagarolo, Italia. Peso superpluma.

Tras obtener cinco victorias antes del límite consecutivas en sus cinco mayores enfrentamientos, resultaba evidente que el imbatido italiano Michael Magnesi 19(11KO)-0 estaba en un excelente estado de forma y que estaba preparado para afrontar una prueba de fuego. Sobre el papel, ésta le llegaba la pasada noche en un duelo ante el invicto campeón de Sudáfrica Khanyile Bulana 12(8KO)-1(1), boxeador de buen nivel que finalmente, en lugar de ser el duro test que necesitaba, terminó vencido en el primer asalto, si bien la conclusión fue poco convencional cuanto menos.

Bulana se movió tratando de evitar los golpes de poder de su rival y lanzó contra él insistentes rectos para intentar contenerlo, si bien Magnesi terminó por alcanzar la distancia corta. En esa posición el italiano lanzó curvos contra un Bulana que primero cerró su guardia para bloquear y que posteriormente intentó desplazarse para evitar la amenaza, realizando su salida demasiado lateral y con la mano adelantada baja, de modo que Magnesi conectó un fuerte croché diestro que le derribó.

Entonces se produjo algo realmente extraño, puesto que la cuenta del árbitro fue tapada por la realización de Rai Sport con la repetición de la caída. Al retornar la emisión al directo el tercer hombre indicaba a Bulana que se fuese a una esquina neutral a la vez que el equipo de Magnesi subía al ring, siendo recibido por lo que aparentemente eran algunos reproches del árbitro. Sea como sea, el duelo había terminado y se había dado como derrotado a Bulana, que parecía decepcionado o incrédulo a la vez que Magnesi, hablando con él, señalaba al árbitro como responsable.

En un principio pudo parecer que algo realmente oscuro había sucedido, pero posteriores repeticiones mostraron que al llegar al ocho de la cuenta Bulana había permanecido arrodillado y que (aunque el árbitro se había hecho un cierto lío con los dedos después) el púgil no se había levantado hasta prácticamente el diez, de modo que el tercer hombre tenía una base lícita para la detención que decretó cuando el boxeador se puso en pie. Respecto a los reproches del árbitro al equipo de Magnesi, eso queda por el momento para el campo de la especulación.

Aunque entre la extraña finalización y la decepcionantemente breve acción muchos no estarán satisfechos, el resultado es ya oficial e inamovible y como mucho se podría buscar una revancha. Por lo demás, en el caso de que el observador considere que la conclusión fue perfectamente lícita, entonces Magnesi logró un golpe en la mesa definitivo para surgir como un buen aspirante en el peso superpluma. Si contrariamente se considera que hubo algo extraño en la detención, en cualquier caso, el púgil italiano cumplió su cometido (tumbando a su rival) hasta que el árbitro o quien fuese lo permitió.

Así, parece que Magnesi (de 26 años) estará emplazado a un nuevo paso adelante que debería llegarle contra un boxeador cercano al top 15 de las listas mundiales o, como mínimo, contra un púgil de nivel medio-alto con enorme encaje que le permita llegar al duodécimo round y adquirir más bagaje de utilidad.