El juez-árbitro le regaló una inmerecida victoria a Campbell Hatton ante Sonni Martínez, Florian Marku venció a Prodan
Daniel Pi
@BastionBoxeo
Tottenham Hotspur Stadium, Londres, Reino Unido. Peso ligero.
Los propios aficionados británicos acudieron a las redes y a los foros tras el combate para expresar vivamente su enfado e indignación por el resultado dado por el juez-árbitro Marcus McDonnell, uno de los reincidentes en actuaciones altamente cuestionables que en la noche del sábado simplemente le regaló una victoria al peso ligero Campbell Hatton 4(0KO)-0 ante el español de origen uruguayo Sonni Martínez 2(0KO)-5.
La victoria de Martínez fue vista por todo observador imparcial, no pudiéndose encontrar una cartulina desfavorable para él ni siquiera entre los analistas británicos. Con todo, el juez McDonnell tuvo claro que su rival se apellidaba Hatton y que es un púgil al que se le dan obsesivamente puestos por encima de su nivel en las carteleras de Matchroom Boxing, de modo que, consecuentemente, le otorgó la inmerecida victoria con puntuación de 58-57.
Durante el primer asalto la agresividad de Hatton se tradujo en algunos fuertes ganchos zurdos arriba y abajo y crochés de mano adelantada, si bien recibió también fortísimos uppercuts a la contra, derechas y hooks al torso. Este planteamiento se repitió en el siguiente round, con Hatton llegando con algunos golpes pero errando muchos y siendo alcanzado con nitidez por las manos del dinámico Martínez.
El acierto del visitante fue a más en el tercer episodio en el que sus uppercuts estallaron contra Hatton, que también recibió hooks al torso y series de uno-dos-hook. Estos éxitos de Martínez, que ni mucho menos se vio en una pugna por encima de su nivel, le dieron alas para mantener su buen trabajo con directos a la contra entre desplazamientos y sus buenas variaciones de altura en las combinaciones de ganchos cuando aceptaba intercambios. De ese modo, recibiendo manos contundentes y nítidas, Hatton pareció perder algo de tensión en el golpeo y de velocidad en las entradas, dando entonces más oportunidades para los contragolpes del visitante, quien además en el quinto asalto tomó la iniciativa y conectó muchos puños claros contra un rival que se vio sobrepasado.
La tendencia no varió en el último asalto, y Martínez llegó con sus uppercuts y con tensos ganchos abajo y arriba provocando daños en Hatton, que a la desesperada intentaba atacar para no perder su invicto pero que no tenía ni energías ni boxeo para evitarlo, entrando entonces en acción la ayuda entusiasmada del juez-árbitro con su tarjeta.
Matchroom Boxing pude seguir dándole puestos relevantes en sus veladas a Hatton y utilizar su apellido en las promociones, pero lo cierto es que esto no va a compensar el obstáculo que suponen sus severas limitaciones. Dado que sólo tiene 20 años y cuatro combates, Hatton cuenta con mucho tiempo para evolucionar y para mejorar, quizás a través de un cambio de entrenador, pero Eddie Hearn no le hace ningún favor dándole tanta exposición antes de que pueda desarrollar su boxeo y de que pueda resolver sus brechas.
Marku ganó por decisión dividida
Abriendo la emisión de DAZN se produjo la victoria del peso wélter albano Florian “The Albanian King” Marku 9(6KO)-0-1 en su crucial duelo ante el rumano Maxim Prodan 19(15KO)-1-1, haciendo valer el primero sus mayores recursos para lograr cartulinas de 97-93 y un 96-94 a su favor que se vieron opuestas por un ridículo e injustificable 91-99 para Prodan.
Como siempre en sus peleas, Prodan tomó la iniciativa al comienzo, pero los desplazamientos de Marku le mantuvieron fuera de posición de golpeo durante gran parte del tiempo y el jab de éste frenó sus entradas, que “The Albanian” King también castigaba con crochés y ganchos diestros. En el segundo episodio Prodan tuvo acierto con potentes combinaciones de uno-dos-hook, habiendo algunos buenos instantes de acción en el tercer round, pero Marku no se dejó desbordar más que puntualmente y en líneas generales usó su superioridad en destreza para llevarse la mejor parte ante su oponente. Es decir, se mantuvo móvil, realizó eficaces bloqueos y desvíos, contuvo a su rival con su jab repetido, ofreció alguna esquiva y sacó algún curvo diestro claro.
En varias peleas anteriores de Prodan se pudo apreciar que su corte de ring era ineficaz y su elección ofensiva previsible y simple, de modo que dando un paso adelante ante un oponente bastante completo, con mucha ambición y moral y con habilidad el problema se agravó, teniendo dificultades para alcanzar a su contrincante en movimiento y no logrando resultados determinantes cuando Marku se detenía. Así el choque se fue consumiendo con Prodan poniendo tesón para lanzar uno-dos-hook con no poca fiereza, pero que sólo de vez en cuando hacían diana nítidamente, y con su oponente tirando de precisión para conectar manos que, junto a acciones defensivas, impresionaron más a dos de los jueces.
Para ser un luchador de otras modalidades que ha hecho una transición al boxeo, y teniendo en cuenta que tiene diez combates de pugilismo, Marku dejó detalles de calidad y, pese a sus excesos de confianza y a los defectos de Prodan, tuvo una actuación meritoria en la que superó a un boxeador fuerte, con pegada, combativo y con una veintena de duelos como púgil profesional. De ese modo, incluso si su actitud no gusta a muchos, lo cierto es que con el adecuado desarrollo podría lograr alguna importante victoria en el top 15, aunque no debería cometer el error de dar un paso adelante demasiado grande tras derrotar al invicto Prodan, dado que todavía le quedan bastantes cosas que ajustar.