Nmomah venció con una toalla lanzada precipitadamente, La Femina castigó duramente a Yegorov

Daniel Pi
@BastionBoxeo

Allianz Cloud, Milán, Italia.

En el arranque de la cartelera italiana de DAZN tuvieron lugar dos combates vencidos antes del límite por invictos, si bien la detención en uno de los choques fue precipitada y en el otro llegó demasiado tarde. En cuanto a la primera, Samuel Nmomah 16(5KO)-0 venció en el cuarto round una pelea en el peso medio ante un Craig O’Brien 12(1KO)-3(2) que terminó enfadado, con razón, con su propia esquina.

El tanteo con los rectos del primer asalto tuvo una considerable igualdad, midiendo ambos sus jabs y llegando con algún claro recto diestro, mientras que en el segundo asalto, aunque Nmomah trató de presionar más, se produjeron contendidos intercambios cuerpo a cuerpo en los que ambos conectaron buenos ganchos abajo.

Con varios cabezazos en el tercer asalto Nmomah provocó un corte a O’Brien, que además comenzó a cansarse un tanto, si bien no estaba ni lo suficientemente mermado ni castigado como para que, cuando en el cuarto round un directo y un gancho zurdo le estremecieron, su esquina se apresurase impresionantemente a tirar la toalla mientras Nmomah fallaba puños, estrellaba otros contra su guardia y él contestaba con un uppercut. O’Brien se mostró contrariado por una detención que resultó altamente extraña, especialmente si la comparamos con todo el beneficio de la duda posible e imposible que le dan la mayoría de las esquinas a sus púgiles, incluso en situaciones críticas en las que que no deberían hacerlo.

Por otro lado, el prospecto del peso supergallo Vincenzo “Winchester” La Femina 10(5KO)-0 tuvo que asestar un sinfín de golpes de poder de más contra el convertido en modesta piedra de toque Oleksandr Yegorov 20(10KO)-7(2)-1 antes de que la esquina de este último enmendase la negligencia del árbitro y optase por abandonar en el quinto asalto.

Pese a estar venido a menos, Yegorov intentó mantener el centro del ring al comienzo y conectó varios secos jabs ante un La Femina sobreconfiado pero que empezó a dar muestras pronto de su explosividad. Con ella impactó contundentes hooks en el segundo round, quedando Yegorov estremecido en varias ocasiones y viéndose incluso manifiestamente desbordado aunque intentaba tirar golpes disuasorios por coraje. En cualquier caso, el ucraniano alcanzó el tercer asalto y volvió a ser duramente castigado por La Femina, que sin preocuparse por las manos que recibía variaba trayectorias asestando fuertes golpes de poder, siendo ya necesaria la detención, algo que incluso el italiano llegó a indicarle al árbitro sin éxito.

Como el tercer hombre no se compadeció, la práctica de tiro al blanco de La Femina continuó en el cuarto y en el quinto round, en el que Yegorov cayó más por acumulación de golpes que por los cortos directos descendentes que recibió antes de tocar el tapiz. Con todo, tampoco entonces ni después el árbitro paró el desniveladísimo choque, siendo finalmente la esquina de Yegorov la que no le dejó salir al sexto round.