Canelo Álvarez se proclamó campeón indiscutido del peso supermedio con victoria por KO ante Caleb Plant
Daniel Pi
@BastionBoxeo
MGM Grand, Las Vegas, Estados Unidos. Campeonato mundial por la corona indiscutida del peso supermedio. Unificación de los cetros WBA, WBC, IBF y WBO.
El estadounidense Caleb “Sweet Hands” Plant 21(12KO)-1(1) necesitaba tener la mejor actuación de toda su carrera, una actuación perfecta, para lograr desbancar al mexicano Saúl “Canelo” Álvarez 57(39KO)-1-2. Pues bien, aunque Plant tuvo un boxeo que su rival afirmó tras el combate que le costó un poco descifrar y que hizo difícil el combate, el rendimiento y la consistencia del estadounidense estuvieron lejos de la perfección, de modo que fue derrotado por KO en el undécimo asalto por Canelo, nuevo campeón indiscutido del peso supermedio y titular WBA, WBC, WBO e IBF.
Como simple curiosidad vale la pena señalar que las cartulinas oficiales parciales del encuentro eran hasta el décimo asalto de 96-94, 97-93 y 98-92, las tres a favor de Álvarez.
El jab de Plant fue lanzado de forma frecuente en el primer round acompañado de una considerable movilidad, escogiendo Canelo una presión calmada en la que seleccionó aislados golpes de poder, por ejemplo, en gancho diestro abajo. Con el paso de los minutos el estadounidense mantuvo su jab y aumentó su fluidez de desplazamiento, realizando alguna eficaz esquiva, usando los bloqueos en las cuerdas y sacando contras en directo diestro o gancho zurdo ante un Canelo que aprovechaba los intervalos en los que tenía en el ensogado a su oponente para impactar tensos ganchos arriba o abajo. En cualquier caso, inicialmente el jab de Plant estaba resultando molesto para Álvarez (recibiendo el mexicano más este golpe que en ningún duelo reciente) y su movilidad le hizo fallar manos que habitualmente conecta, logrando el invicto algo todavía más difícil como contragolpearle de forma habitual.
Con el conteo computerizado (que siempre tiene que ser valorado con mucho cuidado) dando 15 a 1 en jabs favorable a Plant en los primeros tres rounds, Canelo intensificó sus ataques lanzando hooks en el cuarto asalto, ataques a los que sólo se opuso la defensa de su adversario para tratar de evitar daños cruciales. De todos modos, aunque podía bloquear golpes o esquivar otros, Plant cometía un gravísimo error al quedarse estático en muchas ocasiones, ya que entonces Álvarez, más allá de la simple impresión que pudiese causar, llegaba con ganchos arriba o abajo que podían desgastarle y que decantaban de su lado los episodios. De ellos ninguno fue tan claro para Canelo en la primera mitad como el sexto, en el que impactó contundentes hooks de izquierda que los rápidos pero endebles rectos de corto recorrido de Plant no compensaban.
En torno a la mitad pareció que “Sweet Hands” se había salido ya un poco de su pelea, siendo su movilidad entrecortada, dejándose encerrar de más, no encontrando sus esquivas y reduciendo su manejo del jab, de modo que Canelo agrandó su ventaja. Así, Plant necesitaba a toda costa evitar que su oponente trabajase con tanta soltura, lanzando Álvarez combinaciones de curvos ante las que el estadounidense entonces poco más hacía que doblarse, tratar de cerrar su media guardia y sacar tibios directos que, pese a lo que decían las estadísticas de CompuBox (una diferencia de sólo 81-72 en golpes conectados hasta el 8º a favor de Canelo), no podían impresionar más a los jueces que los puños de su rival.
Quizás en el noveno asalto Plant tuvo algo más de cadencia con sus directos que en anteriores episodios, llegando con algún afilado jab y una serie al final del round, pero para el décimo asalto incluso se puso a intercambiar golpes en corta, táctica nefasta para sus intereses y que, si bien le valió para llegar con algunos buenos hooks abajo, le supuso ser objetivo de claros ganchos también. Esto quizás le pudo mermar, ya que en el undécimo episodio todo terminó. Un gancho de izquierda sorprendió y estremeció a Plant, que recibió un uppercut diestro y un nuevo hook zurdo que le llevaron a tocar el tapiz. Tras la cuenta, Canelo hostigó a Plant hasta que con una serie de rectos lo tiró a la lona y el árbitro decretó el final.
Después del enfrentamiento ambos boxeadores se abrazaron, pidiendo Plant perdón a Canelo por el insulto de la conferencia de prensa y este último disculpándole y alabándole, cuestión que fue explicada en la entrevista posterior al combate por Álvarez. Con todo, la mal conducida entrevista de Steve Gray se perdió en todo tipo de detalles y no se centró en lo más importante, cuál va a ser el próximo objetivo de Canelo, aunque es verdad que el propio púgil esquivó un tanto la pregunta cuando llegó al final. Sea como sea, aunque pueda haber retadores más o menos interesantes y aunque Canelo afirmó meses atrás que si se coronaba campeón indiscutido quería defender sus coronas, el hecho es que, más tarde o más temprano, un nuevo ascenso al peso semipesado parece un paso ineludible para retar a uno de los monarcas, siendo estos actualmente Artur Beterbiev y Dmitry Bivol.