Elvis Rodríguez regresó a la senda del triunfo derrotando por KO en el quinto round al invicto olímpico Juan Pablo Romero

Daniel Pi
@BastionBoxeo

MGM Grand, Las Vegas, Estados Unidos. Peso superligero.

Con el combate terminado y con la euforia inicial de la victoria ligeramente calmada ya, el dominicano Elvis “The Dominican Kid” Rodríguez 12(11KO)-1-1 no pudo evitar llorar por la emoción que le provocó haber vencido por KO en el quinto asalto al olímpico mexicano Juan Pablo “El Pivi” Romero 14(9KO)-1(1). Y es que, más allá del crucial triunfo en sí, con él seguramente sintió que probaba su valía y su capacidad de culminar sus aspiraciones después de su primera derrota ante Kenneth Sims y la consecuente supresión de su contrato realizada por Top Rank.

El imbatido Romero tomó la iniciativa desde el arranque, pero en el primer asalto tuvo dificultades para ir más allá de la distancia media ante el zurdo Rodríguez por su velocidad y explosividad, cualidades que se materializaron entonces sobre todo a través de su cruzado de mano adelantada. No obstante, para el segundo episodio “El Pivi” ya logró manejarse para conectar curvos combinados en la distancia media-corta que exigieron más atención a Rodríguez, quien ajustó en el tercer round tratando de anticiparse a las ofensivas rivales pero sin poder contener demasiado el avance del fuerte Romero ni sus insistentes ganchos encadenados.

Aunque el dominicano tenía una ventaja en habilidad y agilidad, no se estaba apoyando en ella lo suficiente, siendo su uso del jab y del juego de piernas elementos secundarios de su actuación. Aun así, en el cuarto episodio “The Dominican Kid” intensificó sus ofensivas en la distancia media-corta e impactó veloces y potentes combinaciones de uppercut y hook antes de que rectos zurdos y nuevos uppercuts hiciesen poner la rodilla en el tapiz a Romero.

El combate no terminó ahí, sino que para el quinto episodio Romero incluso volvió a intentar presionar frontal y consiguió intercambiar hooks, llegando con alguna potente mano. De todos modos, al final del episodio una contundente combinación uppercut diestro-izquierda recta sentó en la lona al mexicano, no respondiendo a la completa cuenta del árbitro.

Si se hubiese desplazado más y hubiese utilizado sus directos con frecuencia quizás Rodríguez se podría haber expuesto a un menor riesgo, pero también es cierto que, pese a los puños recibidos, causó una impresión más honda a ojos de muchos aceptando cruces de golpes y apoyándose en su explosividad para romper el encuentro ante un duro, fuerte e invicto olímpico. Sea como sea, aunque de cara a futuros duelos ante la cumbre de la categoría necesitará mejorar crucialmente su gestión táctica, que en los dos últimos combates no ha sido precisamente óptima, Rodríguez ha logrado, en su presentación en un evento de PBC, un trascendental triunfo antes del límite ante un oponente con aspiraciones, por lo que se ha enderezado drásticamente su camino hacia la aparición en los rankings y puede prepararse para combates de mayor exigencia para 2022.