Luis Ortiz cayó dos veces y no dio buena imagen pero venció por KOT a Charles Martin en semieliminatoria del peso pesado
Daniel Pi
@BastionBoxeo
Seminole Hard Rock Hotel and Casino, Hollywood, Estados Unidos. Semieliminatoria IBF del peso pesado.
El experimento de Premier Boxing Champions de organizar eventos tanto el día de Navidad como el de Año Nuevo no pareció tener los mejores resultados, ofreciendo la visión de estadios prácticamente vacíos a excepción de unas cuantas personas ubicadas en el tramo de grada que quedaba dentro del plano principal de las cámaras. Quizás el punto culminante en asistencia se produjo en el enfrentamiento estelar de la primera velada del año, evento emitido en PPV en el que se enfrentaron dos pesos pesados que no se podían permitir un tropiezo como el cubano, exretador mundial, Luis “King Kong” Ortiz 33(28KO)-2(2) y el estadounidense, excampeón mundial, “Prince” Charles Martin 28(25KO)-3(2)-1.
De este enfrentamiento, en el que hubo cuatro caídas, salió con el brazo en alto Ortiz con un KOT en el sexto asalto, si bien ambos ofrecieron un nivel bastante pobre y pusieron de manifiesto que, tenga las consecuencias que tenga esta eliminatoria, ninguno de los dos parece tener un hueco en este momento entre la élite de aspirantes del peso máximo.
En el primer asalto el zurdo Martin, que había optado por un planteamiento móvil ante su lento rival, encontró una izquierda a la contra que derribó a Ortiz. Quizás el golpe llegó más allá de lo reglamentario, o sea un tanto en la parte trasera de la cabeza de su adversario, pero hubo cuenta y el cubano había arrancado con muy mal pie en la contienda. En adelante trató de compensarlo presionando y llegando con algunas izquierdas aisladas pero, siendo una incógnita su edad real y habiendo disputado sólo un round en cerca de dos años, su ritmo de desplazamiento era escaso y en diversos momentos quedó expuesto a las contras de un Martin que le ofrecía dificultades con su movilidad.
En cualquier caso, habiendo transcurrido más de diez minutos de pelea la cifra de golpes conectados de cada uno estaba en sólo una veintena de golpes, de modo que la intensidad del encuentro era más que limitada, incluso aunque en el final del cuarto asalto un jab de Martin puso en la lona de nuevo a un Ortiz que se vio sorprendido mientras trataba de sacar un ataque con paso.
De todos modos, y aunque en el quinto round Ortiz fue movido por una izquierda, en el sexto éste sacó su propio zurdazo, que sorprendió y estremeció a un Martin que por el impacto quedó confuso y mirando a su esquina. Entonces “King Kong” no desaprovechó la ocasión para lanzarse al ataque hasta que derribó a su oponente, cuyo guante quedó enredado entre las cuerdas, necesitando la ayuda del árbitro para liberarse. Dichos instantes extras no le sirvieron para mucho al exmonarca Martin, que estaba afectado y que terminó cayendo al tapiz tras un uppercut en corto al tratar de cerrar un agarre. Después de volver a ponerse de pie, Martin pareció confuso y no en las condiciones para poder continuar, de modo que el tercer hombre decretó el KOT, aunque esto provocó el enfado de Martin, que posteriormente incluso fue a reprocharle algo a Ortiz y éste le empujó.
Evidentemente, Martin era consciente de que, tres años después de su último combate de relieve, el que perdió contra Adam Kownacki, esta era la mejor oportunidad para entrar en las grandes peleas de nuevo, si bien ante la peor versión del veterano Ortiz no pudo estar a la altura y con ello quizás se quemaron definitivamente sus posibilidades de alcanzar un nuevo mundial.
En cuanto a Ortiz, algunos señalan que el duelo entre zurdos le resultó complicado, que la inactividad le pasó factura o que simplemente tuvo un descuido inicial y un knockdown que le lastraron durante la pugna, pero lo cierto es que su rendimiento fue manifiestamente flojo y continuó una línea descendente. De hecho, incluso aunque con más rodaje pueda tener mejor ritmo y aunque su pegada le pueda sacar de algunos apuros ante rivales de nivel por debajo de la élite, ahora mismo parece que de acceder a un choque en la cumbre podría ser todo un regalo para un boxeador que quiera apoyar definitivamente sus aspiraciones mundialistas. En este sentido, habrá que esperar para ver si la IBF aclara qué ruta debe seguir Ortiz ahora como ganador de una semieliminatoria, puesto que de tener que medirse a Filip Hrgovic no parece que el cubano pueda imponerse al temido medallista olímpico.