Jesse Rodríguez llevó a una nueva dimensión su prestigio con KOT sobre Wangek, que derrotó a Chocolatito y a Estrada
Daniel Pi
@BastionBoxeo
Tech Port Arena, San Antonio, Estados Unidos. Peso supermosca. En juego el título WBC no franquicia.
Si la victoria sobre Carlos Cuadras ya pareció la seria promesa de un futuro espléndido, el estadounidense Jesse “Bam” Rodríguez 16(11KO)-0 fue mucho más allá en la noche del sábado, cuando derrotó por KOT en el octavo asalto a un boxeador que ha ganado su renombre con triunfos sobre futuros miembros del Salón de la Fama como el excampeón mundial tailandés Wisaksil Wangek 50(43KO)-6(3)-1.
Llegando de un éxito que disparó su cotización y siento todavía muy joven (sólo tiene 22 años), habría sido posible que el zurdo Rodríguez tuviese más precipitación en esta nueva mayor pugna de su carrera. Pero contrariamente “Bam” empezó boxeando de manera ordenada, metódica y firme, trabajando bien con el jab, reposicionándose para tratar de evitar las ofensivas rivales y escogiendo excelentes directos de izquierda. Tras un comienzo insuficientmente activo, Wangek empezó a presionar y sacar combinaciones de hooks, pero sus éxitos no fueron determinantes y en general Rodríguez bloqueó, esquivó, recurrió al clinch y conectó contras astutas y con buen timing.
En muchas otras peleas, el púgil con más experiencia es el que termina adaptándose y ajustando mejor con el paso de los asaltos, pero en esta ocasión fue Rodríguez quien cada vez parecía esquivar con más destreza, quien conectaba manos más nítidas tras trazar hábiles diagonales y quien manejaba mejor el tiempo de round. Esto fue coronado finalmente en un séptimo asalto en el que Wangek sufrió un knockdown por un gancho zurdo a la vez que resbaló. El tailandés se levantó y atacó con fiereza, pero fue respondido incluso con golpes más duros por parte de Rodríguez.
Este fue el inicio del fin, puesto que en el octavo episodio los golpes de poder de Rodríguez desbordaron a Wangek, que fue castigado contra las cuerdas sin respuesta por una larga andanada de directos de izquierda y ganchos diestros que llevaron al árbitro a detener el choque.
Dado que tan pronto en su trayectoria ya ha derrotado a dos excampeones mundiales como Cuadras y Wangek, poco se puede decir de Rodríguez más allá de que parece que está destinado a lograr grandes éxitos en su carrera. De todos modos, el problema es que tras haber vencido a uno de los miembros de la élite de la categoría como Wangek (es justo decir que el tailandés ha perdido ya su mejor rendimiento), a Rodríguez sólo le queda enfrentarse en el peso supermosca a púgiles como “El Gallo” Estrada, “Chocolatito” González y Kazuto Ioka, que tienen una enorme ventaja en experiencia además de grandes cualidades técnicas.
Sea como sea, el siguiente paso en la trayectoria de Rodríguez dependerá de si Estrada y Chocolatito pactan su tercer enfrentamiento a continuación, de si Estrada decide aceptar una pugna ante Joshua Franco ordenada por la WBA y de si Matchroom Boxing quiere pisar un poco el freno y darle peleas de consolidación a “Bam” contra contendientes por debajo del nivel de la élite.
Jesse Rodríguez entered a new dimension regarding his prestige with TKO over Wangek, who defeated Chocolatito and Estrada
Daniel Pi
@BastionBoxing
Tech Port Arena, San Antonio, United States. Super flyweight. At stake is the WBC non-franchise title.
If the victory over Carlos Cuadras already seemed like the serious promise of a splendid future, the American Jesse “Bam” Rodríguez 16(11KO)-0 went much further on Saturday night, when he defeated by TKO in the eighth round a boxer who has earned his renown with wins over future Hall of Famers: the former world champion Wisaksil Wangek 50(43KO)-6(3)-1.
Coming from a a great success and still being very young (he is only 22 years old), it would have been possible for the southpaw Rodríguez to have had more precipitation in this new biggest bout of his career. But on the contrary “Bam” started boxing in an ordered, methodical and firm manner, working well with the jab, repositioning well to try to avoid the rival’s offenses and choosing excellent left hands. After an insufficiently active start, Wangek began to press and threw hook combinations, but his successes were not decisive and in general Rodríguez blocked, dodged, clinched and landed clever and well-timed counters.
In many other fights, the more experienced fighter is the one who ends up adapting and adjusting better as the rounds go by, but this time it was Rodríguez who seemed to elude punches more and more skillfully, who connected sharper hands after moving in angles and who managed the round time better. This was finally capped off in a seventh round in which Wangek suffered a knockdown by a left hook as he slipped. The Thai got up and attacked fiercely, but was met with even harder shots from Rodriguez.
This was the beginning of the end, since in the eighth episode Rodríguez’s power shots overwhelmed Wangek, who was punished in the ropes unansweredly by a long barrage of straight lefts and right hooks that led the referee to stop the match.
Given that so early in his career he has already defeated two former world champions in Cuadras and Wangek, little can be said about Rodriguez other than that it seems he is destined for great success in his career. Anyway, the problem is that after having beaten one of the members of the elite of the division like Wangek (it is fair to say that the Thai has already lost his best level), the next step for Rodríguez are boxers like “El Gallo” Estrada, “Chocolatito” González and Kazuto Ioka, who have a huge advantage in experience as well as great technical qualities.
Be that as it may, the next step in Rodriguez’s career will depend on whether Estrada and Chocolatito reach an agreement for their third fight, whether Estrada decides to accept a WBA ordered fight against Joshua Franco, and whether Matchroom Boxing wants to hit the brakes a bit by giving “Bam” consolidation fights against contenders below the level of the elite.