La frase de la semana: Las gravísimas acusaciones de corrupción en demanda contra la WBA
El peso pesado Manuel Charr, cuyo nombre verdadero es Mahmoud Charr, decidió demandar al promotor Don King por, entre otras cosas, incumplimiento de contrato. Este proceso finalmente ha sido extendido a la WBA y a su presidente Gilberto Mendoza, asegurando la demanda que el organismo estuvo implicado corruptamente en los tejemanejes de King. A continuación, en una versión extendida de La Frase de la Semana (en esta ocasión es más bien La Página de la Semana), os ofrecemos una muy interesante parte del larguísimo documento legal presentado por el equipo de abogados de Charr:
“La WBA es una de las cuatro asociaciones clasificadoras del boxeo profesional. Es generalmente considerada una organización corrupta. Esto es en gran parte debido a la práctica de la WBA de aceptar pagos y/o regalos por parte de promotores y “arregladores” a cambio de mejorar fraudulentamente la clasificación de los boxeadores. Esta trama de “pagar por jugar” permite a boxeadores con menos talento o no cualificados participar en combates más rentables (incluyendo, en algunos casos, peleas titulares), que a su vez incrementan los beneficios recogidos por los promotores y/o “arregladores” que participan en estos ilícitos acuerdos bajo mano con los oficiales WBA”.
Seguidamente el documento añade:
“Estos acuerdos ilícitos son ejecutados de muchas maneras: En algunos casos, los promotores y “arregladores” hacen pagos (o proporcionan cosas de valor) directamente a los oficiales WBA. En otros casos, los promotores y “arregladores” ocultan dichos incentivos económicos como “donaciones” o “regalos” a terceras partes, que a su vez blanquean esos incentivos a los oficiales WBA. Aunque Mendoza finge que no recibe salario o emolumento como presidente WBA, esto es falso: Mendoza está entre los oficiales WBA que han recibido y continúan recibiendo incentivos económicos a través de ilícitos acuerdos bajo mano con promotores y “arregladores” que participan en esta trama. Esta incluye a King y DKP [siglas de su empresa, Don King Productions]”.
Quote of the week: The very serious accusations of corruption in lawsuit against the WBA
The heavyweight Manuel Charr, whose real name is Mahmoud Charr, decided to sue the promoter Don King for, among other things, breach of contract. This process has finally been extended to the WBA and its president Gilberto Mendoza, since now in the lawsuit it is assured that this organization was corruptly involved in King’s dealings. Below, in an extended version of The Quote of the Week, you can read an interesting part of the lengthy legal document presented by Charr’s legal team:
“The WBA is one of four ratings associations in professional boxing. It is generally considered a corrupt organization. This is in large part due to the WBA’s practice of accepting payments and/or gifts from promoters and “fixers” in exchange for fraudulently improving the rankings of fighters. This pay-to-play scheme enables less talented or unqualified fighters to participate in more profitable bouts (including, in some cases, title bouts), which in turn increases the profits collected by their promoters and/or “fixers” who engage in these illicit back-door dealings with WBA officials.
The document then adds:
“These illicit deals are executed in many forms: In some cases, promoters and “fixers” make payments (or provide things of value) directly to WBA officials. In other instances, promoters and “fixers” will disguise such economic incentives as “donations” or “gifts” to third-parties, which in turn launder these incentives to WBA officials. Although Mendoza purports to take no salary or emoluments as president of the WBA, this is false: Mendoza is among the WBA officials who have and continue to receive economic incentives through illicit back-door deals with promoters and “fixers” participating in this scheme—this includes King and DKP.”