Tyrone McKenna venció por cuestionable decisión unánime a bravo Chris Jenkins en el semifondo del Conlan-Marriaga
Daniel Pi
@BastionBoxeo
SSE Arena, Belfast, Reino Unido. Peso wélter.
Cualquier aficionado al boxeo ha visto muchas veces este tipo de situaciones: una pelea contendida, con asaltos difíciles de puntuar, entre dos voluntariosos púgiles en las que el visitante parece hacer más para merecer la victoria pero en la que los jueces terminan dando el triunfo al boxeador local. Esto es lo que sucedió en el duelo entre el boxeador de Belfast Tyrone “The Mighty Celt” McKenna 23(6KO)-3(1)-1 y el galés Chris “Rok’n’Rolla” Jenkins 23(8KO)-6(2)-3, pelea que terminó con una cuestionable decisión unánime (doble 96-95 y un extraño 97-94) para McKenna.
En el primer asalto ambos boxeadores intercambiaron hooks arriba y abajo con dureza en el centro del ring, planteamiento que se prolongó en gran medida durante toda la primera mitad, entreteniendo al público con emocionantes cruces de golpes. Cuando en el segundo asalto el zurdo McKenna amagó con caminar y usar su alance estremeció a la contra a su rival, pero en líneas generales las acciones volvieron constantemente al centro del ring, donde Jenkins usó su cadencia de golpeo para mostrarse superior por número de puños conectados.
Viendo que no podía superar la frecuencia de “Rok’n’Rolla” y que la batalla de desgaste le estaba cansando, pasada la mitad McKenna trató de caminar más y usar más sus rectos, algo que le dio mejores resultados con ciertos llamativos contragolpes. Aun así, aunque Jenkins no logró sostener una presión lo suficientemente alta como para anular a su contrincante, continuó llegando con buenos ganchos zurdos arriba, hooks al torso y nítidos directos diestros, por lo que pareció que no había perdido totalmente su ventaja de la primera mitad y que le debería bastar para escaparse con el triunfo.
Esta segunda derrota consecutiva (la anterior fue ante Florian Marku en abril) no deja en una buena posición a Jenkins, pero éste merece todo el crédito posible. Peleando como visitante ante un boxeador más grande y conocido por ser un duro guerrero al que le entusiasman los intercambios, Jenkins batalló en corta hasta obligar a su rival a replegarse y, a ojos de muchos observadores, merecer el triunfo.
En cuanto a McKenna, es un boxeador que no aburre, pero parece inviable que pueda lograr una victoria ante un top 15 de calibre en una división como el peso wélter.
Segundo triunfo
Este choque fue precedido por un rápido triunfo del peso superwélter irlandés, de buena carrera amateur, Kieran Molloy 2(2KO)-0 que se impuso en sólo dos asaltos al normalmente resistente ruso Evgenii Vazem 9(4KO)-36(8). El prospecto usó con firmeza su golpeo al torso antes de que en el segundo round un gancho zurdo abajo, precedido por una combinación uppercut zurdo-cruzado diestro, pusiese en el tapiz a Vazem, que se levantó demasiado tarde.
Tyrone McKenna defeated the brave Chris Jenkins by questionable unanimous decision in the Conlan-Marriaga co-feature
Daniel Pi
@BastionBoxing
SSE Arena, Belfast, UK. Welterweight.
Any boxing fan has seen this type of situation many times: a contested fight, with rounds difficult to score, between two tough fighters in which the visitor seems to do more to deserve victory but in which the judges give the decision to the local. This is what happened in the duel between the Belfast boxer Tyrone “The Mighty Celt” McKenna 23(6KO)-3(1)-1 and Welshman Chris “Rok’n’Rolla” Jenkins 23(8KO)-6( 2)-3, a fight that ended with a questionable unanimous decision victory (double 96-95 and a strange 97-94) for McKenna.
In the first round both boxers connected hard hooks up and down in the center of the ring, approach that generally continued throughout the first half, entertaining the crowd with exciting exchanges. When in the second round the southpaw McKenna tried to walk and use his straight punches, he shook his rival with a counter, but overall the actions constantly returned to the center of the ring, where Jenkins used his punching rate to be superior by number of hands landed.
Seeing that he was being outworked by “Rok’n’Rolla” and that the battle of attrition was wearing him out, from the halfway point McKenna tried to walk more and use his straight punches more, something that worked better for him with some striking counters. Still, while Jenkins couldn’t sustain a pressure high enough to neutralize his opponent, he continued to connect good left hooks to the head, hook combinations to the torso, and crisp right hands to the face, so it seemed he hadn’t totally lost his advantage and that he had done enough to get away with the win.
This second loss in a row (the previous one was to Florian Marku in April) puts Jenkins in a bad position, but he deserves a lot of credit. Fighting on the road against a bigger boxer known for being a tough warrior who likes to exchange, Jenkins battled on short distance until he forced his rival to back down and, in the eyes of many observers, achieved the win.
As for McKenna, he is a boxer who is not boring, but it seems unlikely that he can obtain a victory against a solid top 15 in a division like welterweight.
Second triumph
This clash was preceded by a quick victory of the Irish super welterweight, with a good amateur career, Kieran Molloy 2(2KO)-0, who beat in just two rounds the normally resistant Russian Evgenii Vazem 9(4KO)-36(8). The prospect used his punches to the body firmly before, in the second round, a left hook down, preceded by a left uppercut-right hook combination, put Vazem on the mat. The boxer got up too late and the referee stopped the bout.