Alessio Lorusso batió en el último asalto a Sebastián Pérez para proclamarse campeón de Europa del peso gallo
Daniel Pi
@BastionBoxeo
Arena de Monza, Italia. Campeonato por el vacante cinturón de Europa del peso gallo.
A diferencia de la actitud que tuvo George Kambosos en la revancha ante Devin Haney, el español Sebastián “Látigo” Pérez 13(2KO)-3(1)-1, pese a combatir como visitante, no permaneció inactivo de manos ante el habilidoso italiano Alessio “Mosquito” Lorusso 19(7KO)-4-2, sino que le presionó con toda su voluntad, energías y tenacidad. Así, Pérez generó trabajo, llegó con manos claras y ofreció una imagen brava a pesar de que fue derrotado en el último round a manos del enrachado Lorusso.
El zurdo boxeador local se movió por el ring constantemente tirando jabs, contragolpes en directo de izquierda y curvo de mano adelantada y haciendo esquivas que pusieron de manifiesto su destreza y nivel técnico. Pérez presionó tratando de encerrar a su contrincante y, aunque recibió golpes claros que contestaron a su avance, tuvo sus momentos situando a su rival contra las cuerdas y descargando tensos golpes de poder en gancho y uppercut.
En general fue un choque de estilos interesante, puesto que el frecuente trabajo de Pérez se intercaló con los detalles de calidad de Lorusso, que por ejemplo conectó cruzados de mano adelantada saliendo de la línea de ataque, uppercuts sucedidos por esquivas y consecutivos cortos directos zurdos manteniendo los espacios.
Sin que se sepa cuáles fueron las cartulinas de los jueces, presumiblemente el italiano iba por delante gracias a su eficaz boxeo dinámico, a su defensa y a sus llamativos golpes ante un Pérez demasiado frontal pero que, de todos modos, habría logrado anotarse rounds con su tesón. Con todo, no fue necesario llegar a las cartulinas.
En el undécimo round, Lorusso impactó afilados directos y, tras un empujón, derribó a su rival. El árbitro acertadamente no hizo cuenta, pero “Mosquito” atacó después con peligro con sus hooks. Esto fue una advertencia de lo que iba a suceder en el último asalto, en el que Pérez fue conducido a una esquina, donde recibió una dura y rápida andanada de directos-hooks que le derribó. Tras la reanudación Lorusso conectó cruzados y volvió a llevar al tapiz al afectado visitante, que se intentó levantar, cayó y se alzó de nuevo, aunque sin evitar la detención del combate.
El cambio que ha dado la carrera de Lorusso es muy meritorio. Al inicio de su recorrido profesional, su récord se situó en un nada espectacular 5-4-2 que no auguró grandes logros, pero posteriormente su rendimiento y sus éxitos dieron un vuelco: en 2019 se proclamó campeón de Italia, en 2021 se coronó campeón de la Unión Europea y ahora ha conquistado el cinturón de Europa, situando su racha en 14 victorias. Así, a la espera de que se le nombre un retador obligatorio, Lorusso se acerca a las listas mundiales (no sería de extrañar que apareciese en el próximo ranking WBC) y a la mayor pelea de su carrera hasta la fecha, que le llegará a lo largo de 2023 si no sufre un tropiezo inesperado.
Alessio Lorusso defeated Sebastián Pérez in the last round to become European bantamweight champion
Daniel Pi
@BastionBoxing
Arena Monza, Monza, Italy. Championship for the vacant European bantamweight belt.
Unlike the attitude that George Kambosos had in the rematch against Devin Haney, the Spaniard Sebastián “Látigo” Pérez 13(2KO)-3(1)-1, despite fighting as a visitor, did not remain inactive against the skillful Italian Alessio “Mosquito” Lorusso 19(7KO)-4-2, but instead pressed him with all his will, energy and tenacity. Thus, Pérez generated work, landed clear hands and offered an image of bravery despite the fact that he was defeated in the last round.
The southpaw local boxer moved around the ring constantly throwing jabs, counterpunching with straight lefts and lead hooks and making dodges that showed his skill and technical level. Pérez pressed trying to corner his opponent and, although he received clear shots that answered his advance, he had good moments putting Lorusso against the ropes and unleashing power shots in hook and uppercut.
In general, it was an interesting clash of styles, since the frequent work of Pérez was interspersed with the quality actions from Lorusso, who, for example, connected good check hooks, uppercuts followed by dodges and consecutive short left hands while keeping the distance.
Presumably the Italian was ahead in the judges’ scorecards thanks to his effective mobile boxing, his defense and his eye-catching shots against Pérez, who was too frontal but, in any case, had managed to win rounds with his determination. However, it was not necessary to reach a decision.
In the eleventh round, Lorusso landed sharp punches and, after a push, dropped his rival. The referee rightly did not count, but “Mosquito” later attacked dangerously with his hooks. This was a warning of what was to come in the final round, in which Perez was driven into a corner, where he received a hard, fast barrage of straight-hooks that knocked him down. After the restart, Lorusso landed hooks and took the hurt visitor back to the mat again. Pérez tried to get up, fell and got up again, although without avoiding the stoppage.
The change that Lorusso’s career has experienced is highly commendable. At the beginning of his professional career, his record was an unspectacular 5-4-2 that did not promised great achievements, but later his performances and successes completely changed: in 2019 he was proclaimed Italian champion, in 2021 he was crowned European Union champion and he has now conquered the European belt, putting his streak in 14 victories. Thus, while he waits for a mandatory challenger to be selected, Lorusso gets closer to the world lists (it would not be surprising if he appeares in the next WBC ranking) and the biggest fight of his career to date, which he will reach throughout 2023 if he does not suffer an unexpected setback.