El invicto Makarchuk derrotó al veterano Lukasz Maciec en igualada pugna y se convirtió en campeón de Polonia
Daniel Pi
@BastionBoxeo
Widowiskowo – Sportowa Złotowianka, Zlotow, Polonia. Campeonato de Polonia por el vacante cinturón del peso superwélter.
El invicto Yauheni Makarchuk 8(3KO)-0 logró pasar su prueba de fuego ante el veterano Lukasz Maciec 28(5KO)-7-1, logrando una victoria y el cinturón de campeón polaco del peso superwélter. Sin embargo, su triunfo fue por decisión dividida (94-96 y excesivos 97-93 y 98-92), en un combate muy igualado que perfectamente podría haber acabado en empate o en triunfo de su rival y además mostró que tiene muchísimas cosas que mejorar en su boxeo.
Makarchuk intentó presionar con intensidad desde el primer asalto, pero su falta de experiencia se dejó notar ante el veterano Maciec, ante el que mostró problemas para acortar los espacios de forma eficaz y ser constante en el despliegue de sus hooks. Y es que Maciec, moviéndose bastante más de lo que es habitual en él, sacando un buen número de jabs, combinaciones de rectos y algunas buenas contras en uppercut y cruzado, generó serias dificultades para un Makarchuk voluntarioso y agresivo pero poco preciso y no demasiado astuto.
Además, a esto se sumó un muy insistente uso del clinch por parte de Maciec que cortó el ritmo de su adversario e impidió que pudiese hacer progresos en la distancia corta, aunque a costa de hacer que varios de los asaltos resultasen desordenados y deslucidos.
Hacia la mitad dio la sensación de que Maciec había empezado a padecer desgaste a causa de la alta exigencia física del combate, que tuvo muchos momentos en la distancia corta y media-corta, así que Makarchuk marcó la diferencia con sus andanadas de hooks. Esto no quiere decir que Maciec dejase de moverse, de agarrarse y de intentar trabajar, si bien su cadencia de golpes disminuyó de forma muy notable y su desempeño resultó menos eficaz.
Ayudado por un segundo aire, Maciec logró volver a tener algún asalto mejor posteriormente, pero en general acabó muy cansado y Makarchuk terminó más fuerte, lo que igualó la impresión global del choque, aunque para dos de los jueces sólo aumentó la diferencia entre ambos contendientes.
Este tropiezo, a pesar de poder ser cuestionado, hace que Maciec baje otro peldaño más, y si no se hace con un triunfo destacable pronto terminará viéndose reducido definitivamente a la condición de piedra de toque de nivel nacional. Por su parte, Makarchuk se anotó sobre el papel la victoria más importante de su carrera y se verá alzado a nuevas interesantes oportunidades, si bien tiene que trabajar en las arriba mencionadas brechas, en su defensa activa y en su gestión de la distancia, entre otros aspectos.
Undefeated Makarchuk beat veteran Lukasz Maciec in close match to become Polish champion
Daniel Pi
@BastionBoxing
Widowiskowo – Sportowa Zlotowianka, Zlotow, Poland. Polish championship for the vacant super welterweight belt.
The undefeated Yauheni Makarchuk 8(3KO)-0 managed to pass his decisive test against the veteran Lukasz Maciec 28(5KO)-7-1, as he scored a victory and conquered the Polish super welterweight belt. However, his win was by split decision (94-96 and too wide 97-93 and 98-92), in a very close fight that could have perfectly ended in a draw (or even in a victory for his opponent) and in which he also showed that he has many things to improve in his boxing.
Makarchuk tried to put intense pressure from the first round, but his lack of experience was evident against the veteran Maciec, against whom he had problems shortening the spaces effectively and being consistent in his offensive deployment. Maciec, moving a lot more than is usual for him, throwing a good number of jabs, combinations of straight hands and some good counters in uppercut and hook, created serious difficulties for a boxer that was tenacious and aggressive but not very precise or cunning.
On the other hand, Maciec used clinches very insistently that cut off his opponent’s rhythm and prevented him from making progress at close range, albeit at the cost of making several of the rounds messy and ugly.
Halfway through, it seemed that Maciec had begun to wear down due to the high physical demand of the fight, which had many moments in the short and medium-short distance, so Makarchuk exploited it with barrages of hooks. This does not mean that Maciec stopped moving, holding and trying to work, although his punch rate decreased very noticeably and he was less effective.
Helped by a second wind, Maciec managed to have some better rounds later, but in general he ended up very tired and Makarchuk finished strong. Thus, finally the overall impression was that the clash had been a very even one, despite the fact that for two of the judges Makarchuk’s success in the last stretch only increased the difference between the contenders.
This setback, despite the verdict can be questioned, makes Maciec go down yet another rung, and if he doesn’t get a good victory soon he will end up definitively becoming a national-level stepping stone. For his part, Makarchuk achieved the most important victory of his career and will reach new interesting opportunities, although he has to work on the aforementioned flaws, on his defense, on his distance control, etc.