Previa: Ocho años después, Juan Francisco “El Gallo” Estrada y Román “Chocolatito” González vuelven a enfrentarse
Daniel Pi
@BastionBoxeo
En una muestra más de que los grandes combates en el boxeo se hacen esperar demasiado, ha tenido que llegar marzo de 2021 para que definitivamente se pueda materializar un choque de revancha entre el mexicano Juan Francisco “El Gallo” Estrada 41(28KO)-3 y el nicaragüense Román “Chocolatito” González 50(41KO)-2(1), quienes han tenido a muchos aficionados en vilo por la posibilidad de un nuevo duelo entre ambos desde que pelearon por primera vez en noviembre del año 2012.
El deseo de un nuevo choque no sólo parte del gran enfrentamiento que dejaron ocho años atrás, sino también del hecho de que son dos de los mejores boxeadores de las divisiones ligeras del siglo XXI y ver pugnarlos es ver escribirse historia del pugilismo.
Con todo, no son pocos también los que piensan que realmente ambos han consolidado ya su lugar en los libros de boxeo y que buscar un nuevo cruce directo entre ambos podría llegar a ser contraproducente a estas alturas, ya que de seguir caminos diferentes los dos podrían seguir expandiendo sus legados con nuevos retos en lugar de quedarse estancados en una competencia que al menos ya la hemos visto materializarse una vez sobre el ring, no como en otros casos.
Sea como sea, este sábado en el American Airlines Center de Dallas, Estados Unidos, y retransmitido por DAZN, estos dos icónicos boxeadores de las divisiones más ligeras, que rompieron los límites de los púgiles de las categorías de menos peso para llegar a situarse por consenso en el top 10 libra por libra, disputarán un enfrentamiento en el que se unificarán las coronas WBA y WBC del peso supermosca y que debería dejarnos momentos épicos.
Aunque en el primer cruce entre ambos “Chocolatito” fue quien se impuso por decisión unánime, algo que suele pesar de cara a las revanchas, en esta ocasión entra como favorito en las apuestas Estrada, puesto que muchos piensan que cuando se produjo el choque precedente entre ambos “El Gallo” no estaba preparado para los grandes combates y que ahora ha expandido su bagaje, habiendo mostrado, según afirman, con su victoria ante Wangek que está por encima del nivel de un González que ha dado muestras de merma en su rendimiento.
De todos modos, esta lectura es sesgada, ya que inmediatamente después de la derrota ante González, en la que el mexicano ya tuvo buen boxeo, Estrada se anotó lejos de casa victorias importantísimas ante púgiles del calibre de Brian Viloria o Milán Melindo, entrando en una racha de casi cinco años, por lo que es cuanto menos inexacto que no estuviese preparado para las pugnas ante la élite cuando se produjo el primer combate. Por otro lado, aunque es cierto que Estrada derrotó a Wangek, triunfo con una importante carga moral, el hecho es que también sufrió una derrota contra él y sólo venció ajustadamente la revancha, estando el tailandés afectado entonces por problemas personales que perjudicaron su actuación sobre el ring.
Por último, aunque para algunos las derrotas de González ante Wangek marcaron el final de una era, el hecho es que desde que regresó tras ellas ha dejado actuaciones muy buenas, destacando su demolición del invicto monarca Khalid Yafai, no pudiéndose pasar por alto tampoco que Estrada ha tenido dificultades contra Dewayne Beamon, ante el que se llegó a ver notablemente desgastado, y contra Carlos Cuadras, que le tiró a la lona en una ocasión.
Así, resulta sorprendente que algunos esperen que Estrada vaya a lograr un triunfo abrumador basándose en una supuesta disparidad de nivel actual, puesto que hay motivos para sostener la viabilidad de la victoria de los dos púgiles, y existe la opción de una victoria por detención, pero sería inesperado que uno de ambos lograse dominar el enfrentamiento amplísimamente de principio a fin.
Y es que Chocolatito es uno de los mejores boxeadores de presión que ha habido en las divisiones ligeras, siendo su incansable ritmo, su altísima frecuencia de golpes y su gran capacidad para encontrar huecos para sus combinaciones en corta elementos que le hacen muy difícil de superar para cualquier púgil. Por su parte, Estrada es un boxeador con mucha astucia, que puede llegar a tener un juego de piernas realmente ágil y brillante y que cuenta con un excelente manejo del contragolpe, gran precisión y destreza, así que siempre tiene la capacidad para mostrarse competitivo, incluso en los momentos comprometidos.
Por ello, se perfila un muy interesante choque de estilos, en el que Estrada tendrá que intentar explotar su velocidad de manos, quizás buscando generar daños determinantes a la contra en la primera parte de la pelea, puesto que será complicado que pueda mantener un dinamismo constante durante doce rounds, especialmente habiendo dado últimamente algunas muestras de cansancio recurrente y de indecisión en corta. Por su parte, González, aunque podría pasar momentos de dificultad en el primer tramo por la ralentización que ha sufrido y necesitará estar realmente atento y eficaz en su movimiento de cintura y de cabeza mientras ataca, si consigue mantener constantes sus ofensivas debería poder aprovechar más tarde en la pugna la reducción de la movilidad de su oponente e intentar superarlo por insistencia en una batalla de desgaste.
Sea como sea, aunque algunos consideran prácticamente que este combate marcará la valoración de las carreras de ambos, el hecho es que los dos han hecho ya suficiente por consenso como para que sean candidatos evidentes al Salón de la Fama (en el caso de González su inclusión debería estar garantizada) y tras el enfrentamiento seguirán teniendo acceso a mayúsculas pugnas.
DAZN emitirá la velada encabezada por este combate, que será acompañado entre otros duelos por el Kyoguchi-Vega y el McCaskill-Braekhus II, desde las 2:00 de la madrugada del sábado al domingo en España, o sea las 20:00 ET/17:00 PT en territorio estadounidense.