Xavier Martínez conservó su posición de aspirante obligatorio WBA superpluma venciendo de forma unánime a Juan Carlos Burgos
Daniel Pi
@BastionBoxeo
Dignity Health Sports Park, Carson, Estados Unidos. Peso superpluma.
Ciertamente, no afrontaba ni por asomo un combate tan exigente como cuando se midió en su anterior pugna a Claudio Marrero, de modo que la victoria más convincente lograda la pasada noche debe verse con cierta perspectiva. Sin embargo, el aspirante oficial WBA del peso superpluma Xavier Martínez 17(11KO)-0 se hizo con un merecido triunfo unánime ante el veterano Juan Carlos “Miniburgos” Burgos 34(21KO)-5-2, al que en líneas generales superó con su destreza y su frescura pugnando con espacios y batallando en corta hasta lograr puntuaciones favorables de triple 99-91.
En el primer asalto nuevamente se puso de manifiesto la habilidad contragolpeadora de Martínez, que sin necesitar estudio para medir los tiempos de ataque de su contrincante le asestó nítidas contras con directos diestros, ganchos zurdos y croché de derecha, enrojeciendo un tanto el rostro de un Burgos contra el que también llegó con su uno-dos. Así, en adelante “Minburgos” optó por intentar llevar la pelea a la distancia media-corta, estrategia que le convenía ante un adversario más técnico que él y en la que pudo conectar algunos curvos, si bien Martínez no se amedrentó y sacó combinaciones de ganchos que por precisión, rapidez y destreza resultaron superiores.
A pesar de que no era una mala idea crear una pelea con intercambios, Burgos no estaba teniendo la frecuencia y la determinación necesarias para lograr resultados determinantemente positivos, de modo que en el cuarto asalto terminó perdiendo la iniciativa y presionando en corta y de espaldas a las cuerdas por Martínez. No obstante, en el quinto y sexto round Burgos, quizás apoyado en un segundo aire algo temprano, acometió con acrecentado ímpetu, puso contra el ensogado a su rival y tuvo sus mejores momentos de la pelea con decididas series de rectos y ganchos.
Con todo, ahí quedó en gran medida su reacción, puesto que desde el séptimo round Martínez volvió a la carga y le presionó con un buen volumen de hooks, lanzando Burgos alguna eventual contraofensiva con tesón en la que fue contragolpeado con claridad por el imbatido, quien por lo demás se llevó la mejor parte también cuando al final se produjeron entretenidos e intensos intercambios.
Ante un oponente experimentado, sin derrotas antes del límite y al que se enfrentaba tras caer dos veces a la lona en su último combate, Martínez tuvo la victoria de rodaje, adquisición de experiencia y recuperación de la moral que buscaba, dejando además destellos de buen boxeo con ciertas esquivas y contras. Con todo, no parece que esté al nivel de la complicada cumbre del peso superpluma, especialmente si tenemos en cuenta que teniendo la etiqueta de aspirante obligatorio WBA (posición difusa por la política de múltiples “campeones”) y siendo miembro de PBC sus adversarios potenciales son el “supercampeón” Gervonta Davis o el titular “interino” Chris Colbert.
Dado que Davis parece tener un rendimiento completamente diferente, está en otra dimensión en cuanto a bolsas y objetivos y Martínez no tiene mucho que ofrecer en cuanto a renombre, lo más probable es que PBC pueda buscar un interesante Martínez-Colbert que, teniendo en cuenta los problemas que padeció ante la explosividad y los reflejos de Marrero, podría resultarle realmente complicado al primero de ambos.