Maxi Hughes conecta cruzado de izquierda contra Jovanni Straffon

Maxi Hughes siguió adelante con su remontada anulando y estremeciendo a Jovanni Straffon

Daniel Pi
@BastionBoxeo

Emerald Headingley Stadium, Leeds, Reino Unido. Peso ligero.

Hay una diferencia grande entre que un boxeador sea capaz de dar una sorpresa puntual o que pueda lograr una serie de victorias contra pronóstico que demuestren sin duda que tiene un nivel boxístico muy notable. Esta diferencia quedó clara en la trascendental pelea entre el británico Maxi “Maximus” Hughes 24(5KO)-5(2)-2 y el mexicano Jovanni “Impacto” Straffon 24(17KO)-4-1, en la cual el primero de ambos (que entraba en una fantástica racha) utilizó un boxeo excelentemente ejecutado para lograr una amplísima victoria ante un púgil que había conseguido dar una sorpresa en su último combate en gran medida debido simplemente a un error de su oponente. La victoria de Hughes llegó con una decisión unánime y puntuaciones de doble 120-107 y un 119-109.

La estrategia de los contendientes fue la prevista, buscando Straffon acortar los espacios para intentar imponer sus golpes de poder como en el triunfo ante Tennyson que le valió esta segunda oportunidad. Sin embargo, Hughes es un púgil muy taimado y astuto y, a diferencia de Tennyson, no iba a cometer el atroz error de aceptar una guerra de intercambios estático y en corta desde el inicio, sino que se movió hacia un lado y hacia otro, tiró el jab con regularidad, utilizó cortas combinaciones de uppercut y hook y tuvo especialmente una gran gestión defensiva.

Desde este último punto de vista, Hughes mostró verdadera maestría adquirida a través de la experiencia, utilizando en ocasiones un pequeño paso atrás, en otras una oportuna rotación de cintura o simplemente cerrando al máximo su guardia y acortando súbitamente los espacios para evitar que los puños de “Impacto” pudiesen tener recorrido. De ese modo, aunque no dejó ni mucho menos a cero el acierto de su contrincante, evitó verse en situaciones de claro apuro, estableció en líneas generales un control táctico, comenzó a acumular asaltos en su cuenta e incluso encontró huecos para precisos y decididos contragolpes.

Y es que la victoria de Hughes no se cimentó, pese a su acierto desde el punto de vista dinámico y defensivo, en un conservadurismo, sino que en multitud de ocasiones mostró mucho coraje arriesgándose en breves cruces de golpes en los que confió en su velocidad y precisión para anotar manos decisivas, destacando entre ellos un fenomenal curvo de izquierda que en el quinto round dejó muy tocado a Straffon, quien fue hostigado durísimamente durante el resto del asalto. La detención en ese round habría sido posible, pero el árbitro dejó seguir las acciones, continuando los ataques (entonces bastante precipitados) de Hughes, que viendo que había mermado a su rival y que sus puños no le habían dañado aceptó más intercambios estático.

De todos modos, aunque entonces se sobreconfió aceptando una pelea más física de lo que le convenía, dando facilidades a su adversario, el británico desde el séptimo asalto volvió a recurrir a un boxeo más móvil, táctico e inteligente que le permitió reducir los riesgos e igualmente volver a dominar las acciones con claridad. Así, aunque hasta el final el visitante no cesó en su empeño ofensivo, Straffon se vio superado por la selección, variedad y eficacia de los golpes del local, que le hizo fallar muchas manos y que eventualmente (como en el octavo asalto) incluso le estremeció ligeramente.

En los días previos al Hughes-Straffon, el promotor Eddie Hearn señaló que el ganador de este combate podría ser el próximo adversario de Devin Haney, cosa que de materializarse le supondría a Hughes la mayor bolsa de su carrera y un nivel de atención que no podía ni haber soñado años atrás, cuando a duras penas se mantenía a flote en el circuito británico. En cualquier caso, le dé Matchroom esta pelea al púgil o no, Hughes ha completado una remontada en su carrera de la que puede estar muy orgulloso ya aunque no consiga ni un triunfo más y que sin duda alguna le ha hecho un sólido top 15 y merecedor de una pugna de calibre en la parte alta, oportunidad que posiblemente le llegará en su próxima subida a un cuadrilátero.