Chris Eubank Jr. ganó maratón ante Liam Williams. Claressa Shields logró abrumadora victoria
Daniel Pi
@BastionBoxeo
Motorpoint Arena, Cardiff, Reino Unido. Peso medio.
Tener como entrenador a un exboxeador dopado como Roy Jones Jr. pudo haber contribuido decisivamente a que los jabs de Chris Eubank Jr. 32(23KO)-2 se convirtiesen en armas que le bastaron para lograr los knockdowns que le otorgaron la victoria ante un fuerte exretador mundial como Liam “The Machine” Williams 23(18KO)-4(1)-1. No obstante, aunque con tres knockdowns legales y uno regalado por el árbitro Eubank consiguió una victoria unánime, por lo general tuvo una actuación que superó lo patético en varios momentos tanto por sus infinitos gestos bravucones, como por su correr el ring sin voluntad ofensiva alguna durante largos tramos y sus innumerables manos erradas.
Aunque el consenso sobre este combate estuvo en cartulinas en torno al 114-110 y el 115-109, lo que significa que sin las caídas Eubank a duras penas podría haber vencido el choque, los jueces dieron 117-109 (otra vez Terry O’Connor), 116-108 y 116-109.
La velocidad de Eubank se tradujo en el primer asalto en varias esquivas antes de anotarse un knockdown al sorprender con un directo de mano adelantada a Williams. En la reanudación este último tuvo que recurrir a los clinches para pasar el mal rato, pero para el segundo asalto intentaba presionar de nuevo, aunque por poco tiempo evitó los apuros: un gancho zurdo precedido por un directo le volvió a poner en el tapiz.
La posición en las cartulinas de Williams era crítica, de modo que le tocó seguir intentando atacar buscando que su pegada le diese una opción de remontada, empezando a llegar con alguna mano peligrosa en el tercer asalto, si bien para el cuarto un nuevo jab le puso en el tapiz. En ese punto de la pelea Eubank se comportó como el bravucón que es y se dedicó a hacer gestos chulescos sin cesar, mientras realmente se pasaba más tiempo caminando y fallando manos que realizando acciones relevantes. En cualquier caso, la victoria a los puntos de Eubank era ya inevitable si Williams no empezaba a anotarse knockdowns.
Aunque por lo general su eficacia fue limitada, no estando bien ejecutado su corte de ring y encimándose en sus ofensivas, que provocaban embarrados clinches en no pocas ocasiones, Williams empezó a tener éxitos a partir de la mitad con sus derechas rectas, capturando rounds de forma consecutiva ante un Eubank que sólo caminaba sin coherencia buscando explosivos contragolpes contra el aire. Lo que inicialmente pudo parecer únicamente una muestra de coraje de Williams se comenzó a convertir en algo más serio en el noveno asalto, en el que una derecha dejó ligeramente tocado a Eubank.
Williams siguió esforzándose buscando su tenso jab, derechas rectas y ganchos en cruces entre buenas esquivas de cintura, si bien en el undécimo asalto el árbitro contabilizó como un knockdown a favor de Eubank un empujón y con ello el enfrentamiento quedó sentenciado. De todos modos no terminó sin que antes Eubank completase su maratón, corriendo por el ring mientras se comportaba como un bufón.
Si los “mágicamente” mejorados jabs de Eubank no hubiesen roto el combate al comienzo, podríamos estar hablando ahora de un resultado muy diferente. Pero con la victoria Eubank se afianzará como número 1 WBA y en el top 3 WBC y WBO, por lo que se acercará a una pugna del máximo calibre en la categoría. Su intención es enfrentarse a Golovkin, al que se negó a medirse cuando estaba en plenitud pero al que ahora sí quiere medirse al estar el kazajo cerca del retiro. Sea como sea, la actitud de Eubank y su gestión táctica siguen sin ser adecuadas, y aunque pueda lograr añadir algún nombre relevante a su récord, cuando le llegue una pugna ante un púgil de élite en plenitud seguramente sus sueños volverán a toparse con la realidad.
Claressa Shields a la espera de Savannah Marshall
El 12 de marzo la monarca WBO Savannah Marshall peleará en un combate de preparación contra Femke Hermans, siendo este el último obstáculo para que veamos una pelea por la corona indiscutida del peso medio femenino. Y es que, en cuanto a la campeona WBA-WBC-IBF Claressa “T-Rex” Shields 12(2KO)-0, ésta cumplió su parte el sábado, en el semifondo del Eubank-Williams, batiendo por decisión unánime (triple 100-90) a Ema Kozin 21(11KO)-1-1.
Con muchísima calma, Shields aguardó las entradas de Kozin para contragolpearla con sus rectos o abiertos cruzados, alcanzándola con manos claras pero aisladas. Kozin hizo lo que pudo, pero con desventaja en técnica, velocidad, reflejos, defensa, etc., erraba la mayoría de sus puños por las esquivas de su rival y en todas las distancias se veía incomodada por la precisión de Shields. La campeona, viendo que era abrumadoramente superior, intentó atacar más desde el tercer asalto, encerrando y poniendo en apuros a la retadora en el cuarto y dejándola cerca la detención arbitral en el quinto con una prolongada serie de golpes.
De todos modos, la castigada Kozin no sucumbió, sino que siguió intentando aguantar los golpes de poder de Shields arriba y abajo, asalto tras asalto, hasta consumir los diez muy desnivelados episodios.
Chris Eubank Jr. won a marathon against Liam Williams. Claressa Shields achieved overwhelming victory
Daniel Pi
@BastionBoxing
Motorpoint Arena, Cardiff, UK. Middleweight.
Having a doped ex-boxer like Roy Jones Jr. as a trainer could have contributed decisively to make the jabs of Chris Eubank Jr. 32(23KO)-2 weapons that were enough for him to achieve the knockdowns that gave him the victory against a strong former world challenger as Liam “The Machine” Williams 23(18KO)-4(1)-1. However, although with three legal knockdowns and one given as a present by the referee Eubank achieved a unanimous victory, in general he had a performance that at various times was pathetic for his constant cocky gestures, his running around the ring without offensive will for long stretches and his innumerable punches missed.
Although the consensus on this fight was on a scorecard around 114-110 and 115-109, which means that without the knockdowns Eubank could hardly have won the match, the judges gave 117-109 (again Terry O’ Connor), 116-108 and 116-109.
Eubank’s speed translated into several dodges in the first round before he scored a knockdown by surprising Williams with a straight lead hand. At the restart the latter had to resort to clinches to pass the bad moment, but in the second round he tried to press again, although he avoided trouble for a short time: a left hook preceded by a straight shot put him back on the mat.
Williams’ position on the scorecards was critical, so he had to keep trying to attack hoping that his power could give him an option. He began to connect with some dangerous punches in the third round, although by the fourth a new jab put him on the canvas. At this point in the fight, Eubank behaved like the bully that he is and was constantly making cocky gestures, while actually spending more time walking and missing hands than doing relevant actions. In any case, Eubank’s points win was already inevitable if Williams didn’t start scoring knockdowns.
Although in general his effectiveness was limited and his ring cut not well executed, Williams started to have successes from the mid point of the fight with his straight right hands, capturing rounds consecutively against Eubank, who then only walked incoherently looking for explosive counterattacks against the air. What initially seemed like nothing more than a demonstration of courage of Williams began to turn into something more serious in the ninth round, in which a right hand slightly hurt Eubank.
Williams continued throwing his tense jab, straight right hands and hooks between good waist dodges, although in the eleventh round the referee counted a push as a knockdown in favor of Eubank and with it the confrontation was sentenced. However, it did not end before Eubank completed his marathon, running around the ring while behaving like a buffoon.
If Eubank’s “magically” enhanced jabs hadn’t broken up the fight early on, we might be talking about a very different result now. But with the victory, Eubank will solidify himself as number 1 in the WBA and as top 3 in the WBC and WBO, so he will be close to a great fight in the division. His intention is to face Golovkin, whom he refused to fight when “GGG” was in his prime. Be that as it may, Eubank’s attitude and his tactical management are still not adequate, and although he may manage to add some relevant names to his record, when he reaches a bout against an elite boxer in his peak, his dreams will surely meet reality again.
Claressa Shields waiting Savannah Marshall
On March 12, the WBO titlist Savannah Marshall will fight in a preparation bout against Femke Hermans that will be the last obstacle before an undisputed championship in the female middleweight division. As for the WBA-WBC-IBF champion Claressa “T-Rex” Shields 12(2KO)-0, she did her part on Saturday, in the Eubank-Williams undercard, beating Ema Kozin 21(11KO)-1-1 by wide unanimous decision (triple 100-90)
Very calmly, Shields waited for Kozin’s attacks to counter her with straight punches, which connected clearly but not in a very constant way. Kozin did what she could, but with disadvantages in technique, speed, reflexes, defense, etc., she missed most of her punches because of her rival’s dodges and at all distances she was bothered by Shields’s accuracy. The champion saw that she was overwhelmingly superior to her opponent, so she tried to attack more from the third round, putting against the ropes the challenger in the fourth, and close to a referee stoppage in the fifth with a prolonged combination of punches.
Still, the battered Kozin didn’t succumb, but instead kept trying to resist Shields’s power shots up and down, round after round, until she consumed the full distance of this very lopsided fight.