Previa: David Benavídez y Caleb Plant disputan combate que marcará sus carreras
Daniel Pi
@BastionBoxeo
Hay enfrentamientos que marcan la carrera de los boxeadores que participan en ellos y que, independientemente de si son un campeonato mundial o no, resultan un punto de inflexión en sus trayectorias. Este es el tipo de duelo que disputarán este sábado los excampeones mundiales estadounidenses David “El Bandera Roja” Benavídez 26(23KO)-0 y Caleb “Sweet Hands” Plant 22(13KO)-1(1) en el MGM Grand de Las Vegas, Estados Unidos.
Más allá de que el ganador se convertirá en el siguiente retador obligatorio de Canelo después de John Ryder y de que se convertirá en una de las mayores figuras actuales del boxeo de su país, emplazándose a nuevas grandes pugnas, eventos en PPV y mayúsculas bolsas, el vencedor recibirá un inigualable impulso moral. Y es que tras años de tensión, insultos, cruces de palabras y competencia indirecta, uno de los dos logrará hacerse con el triunfo y, con ello, dará todo un revés a su rival que podría tener consecuencias permanentes en su confianza y estado mental deportivo.
Por otro lado, la pelea nos dará una respuesta mucho más clara de hasta dónde llega realmente el nivel de amenaza de Benavídez. Es decir, aunque algunos dan por hecho que es una bestia imparable que podría aplastar a cualquier boxeador de élite, el hecho es que no tenemos pruebas de ello: hasta ahora Benavídez no se ha enfrentado nunca a un rival de nivel alto en plenitud, habiendo llegado sus cinco mayores victorias ante Ronald Gavril, Anthony Dirrell, Roamer Angulo, Ronald Ellis y un acabado David Lemieux.
Por ello, aunque muchos dan por sentado que Plant terminará noqueado en unos pocos rounds, lo cierto es que si Benavídez necesitó, respectivamente, diez y once asaltos para acabar con Angulo y Ellis, no está ni mucho menos garantizado que vaya a lograr un triunfo antes del límite ante un boxeador con muchísima más calidad que estos dos púgiles y que debería luchar con muchísima más determinación que ellos.
De todos modos, lo arriba dicho no significa que no existan dudas respecto a Plant, todo lo contrario, puesto que parte de las cosas que se pueden señalar en contra de Benavídez también se pueden decir de él. En el caso de Plant, sus cinco mayores victorias han sido ante Rogelio Medina, José Uzcátegui, Vincent Feigenbutz, Caleb Truax y Anthony Dirrell, lo que tampoco da forma para nada a un récord excepcional. Además, Plant tiene una derrota que, aunque la padeció ante un oponente como Canelo, no convenció precisamente a los fans y expertos, sobre todo después de que se publicase un vídeo en el cual, durante el combate, el púgil estadounidense pareció amedrentado y empezó a hablar y a alabar a Álvarez.
Este precedente, sumado al hecho de que en su anterior mayor combate padeció dificultades y tuvo que trabajar muy duro para lograr el triunfo sobre Uzcátegui, ayuda a que Benavídez sea considerado favorito. En otras palabras, si ante pegadores y boxeadores ofensivos menos temibles que “El Bandera Roja”, que tiene el tamaño de un peso crucero, no logró imponer su boxeo dinámico con eficacia durante los doce asaltos, es posible que pueda sucumbir ante las veloces combinaciones de un Benavídez que seguramente saldrá al ring con un plus de agresividad y ansia por causar daños.
Dicho esto, Plant tiene una ventana para el éxito si sabe aprovechar que Benavídez confía demasiado en sus dimensiones, en su potencia y en su encaje y se lo hace pagar de la forma correcta: Benavídez se descuida bastante al ataque y a menudo avanza contra sus adversarios de forma frontal y dejando su torso desprotegido, lo que da oportunidades para que un boxeador preciso y hábil pueda trabajar. Sea como sea, Plant no podrá dejarse encerrar en las cuerdas o parar sus pies en la distancia media como ante Canelo. Y si comete la osadía de intentar acortar los espacios para tratar de evitar que Benavídez, por su largo alcance, se sienta cómodo, tendrá que intentar ser todo lo demoledor que pueda, evitar dejarse desgastar en clinches y efectuar transiciones a posición defensiva con enorme astucia y fluidez.
Algunos creen que Plant, que cuenta esta vez en su esquina con el afamado Stephen Edwards, ofrecerá una actuación perfecta en la que quizás pueda sorprender al mundo, a lo mejor a través de contragolpes decisivos, cosa a la que el púgil pareció apuntar refiriéndose a apoyar más peso en sus golpes. No obstante, la cuestión está precisamente ahí, en que Plant necesita una actuación perfecta tomando riesgos y esperar tener resultados decisivos, mientras que el boxeo de Benavídez le permite, incluso sin su mejor versión y sin arriesgar al máximo, tener margen suficiente para ser superior.
En fin, el hecho es que este es un gran combate, que tendrá momentos trepidantes y que, independientemente del resultado, abrirá la puerta para más importantes peleas en el peso supermedio ya sea contra Canelo o contra Morrell, Andrade, Charlo, etc.
El enfrentamiento Benavídez-Plant será el estelar de un evento PBC cuyo respaldo será tratado en otra previa. La cartelera principal será emitida en Estados Unidos por un PPV de Showtime desde las 21:00 ET/18:00 PT del sábado, la 3:00 de la madrugada en España.
Preview: David Benavídez and Caleb Plant clash in a defining fight for their careers
Daniel Pi
@BastionBoxing
There are bouts that define the career of the boxers who participate in them and that, regardless of whether they have a world belt at stake or not, are a turning point. This is the type of bout that former American world champions David “El Bandera Roja” Benavídez 26(23KO)-0 and Caleb “Sweet Hands” Plant 22(13KO)-1(1) will face this Saturday at the MGM Grand in Las Vegas, United States.
Beyond the fact that the winner will become Canelo’s next mandatory challenger after John Ryder and that he will establish himself as one of the biggest current boxing names in his country (moving on to new important fights, PPV events and huge purses), the victor will receive a formidable morale boost. After years of tension, insults, exchanges of words and indirect competition, one of the two fighters will leave the ring with his arm raised and, with this, will inflict a damage that could have permanent consequences on the confidence and the state of mind of his rival.
On the other hand, it will give us a much clearer answer as to how much of a threat Benavídez really is. That is to say, although some take it for granted that he is an unstoppable beast that could crush any elite boxer, the fact is that we have no proof of this: up to now, Benavídez has never faced a prime high-level opponent, and his five biggest victories have been against Ronald Gavril, Anthony Dirrell, Roamer Angulo, Ronald Ellis and a finished David Lemieux.
For this reason, although many assume that Plant will end up knocked out in a few rounds, the truth is that, if Benavídez needed ten and eleven rounds respectively to get rid of Angulo and Ellis, it is by no means guaranteed that he will achieve a stoppage victory against an opponent with much more quality than these two aforementioned boxers and who should fight with much more determination than them.
In any case, what has been said above does not mean that there are no doubts regarding Plant, quite the contrary, since part of the things that can be pointed out against Benavídez can also be said about him. In Plant’s case, his five biggest wins have come against Rogelio Medina, José Uzcátegui, Vincent Feigenbutz, Caleb Truax and Anthony Dirrell, which is not an exceptional record at all. In addition, Plant has a defeat and in it, although he suffered it against an opponent like Canelo, he did not exactly convince fans and experts, especially after it was published a video in which, during the fight, the American boxer seemed intimidated and began to praise Álvarez.
This precedent, added to the fact that in his previous biggest fight he had difficulties and had to work very hard to beat Uzcátegui, helps Benavídez to be considered the favorite. In other words, if against a boxers less fearsome and less dangerous than the cruiserweight-sized Benavídez, he failed to impose his mobile boxing effectively during twelve rounds, he may well succumb to the fast combinations of “El Bandera Roja”, who this time will surely fight with even more aggressiveness and desire to cause damage.
That said, Plant has a chance of success if he knows how to take advantage of the fact that Benavídez is too confident in his size, power and chin and makes him pay for it in the correct way: Benavídez often neglects his defense on the attack and charges frontally and leaving his body unprotected, which gives opportunities for a precise and skilled boxer to work. Be that as it may, Plant will need to avoid at all costs to be pinned on the ropes or stop his feet in the middle distance as he did against Canelo. And if he is bold enough to shorten the spaces to try to prevent Benavídez (who has a longer range) from feeling comfortable, he will have to try to be as devastating as possible, avoid being worn down in clinches and make transitions to defensive position with great cunning and fluidity.
Some believe that Plant, who this time has the prestigious Stephen Edwards in his corner, will offer a perfect performance in which he could perhaps shock the world, maybe through decisive counterpunches, something to which the boxer seemed to aim talking about sitting more in his punches. However, the question is precisely that: Plant needs a perfect performance, taking risks and hoping for crucial results, while Benavídez’s boxing allows him, even without offering his best version and without risking as much, to have enough margin to be superior.
Anyway, the fact is that this is a great fight that will have exciting moments and that, regardless of the result, will open the door for more important fights at super middleweight either against Canelo or against Morrell, Andrade, Charlo, etc.
The Benavídez-Plant bout will be the main event of a PBC evening whose support will be discussed in another preview. The main card will be broadcast in the United States by a Showtime PPV from 9:00 p.m. ET / 6:00 p.m. PT on Saturday, 2:00 a.m. in the United Kingdom.